Construir

Hay que darle tiempo al tiempo, nada se construye de un día para otro. Morféo de Gea

¿Le pasa que al escuchar o leer este enunciado suena como algo lejano en el tiempo?

He tenido a la vista este escrito. En verdad en un instante de atención lo escribí en mi cuaderno de notas de estudio y luego de la propuesta de Encuentros DDLA no lo he olvidado aunque no esté a la vista.  Ahora iré colocando afuera otros escritos para compartir la puesta en práctica y conclusiones que se vayan haciendo certezas, idea compartida de Hermanos de camino en sintonía.

Volviendo a la oración del principio, les comparto que teniendo la voluntad de hacer cambios que venía desde hace un tiempo cumpliendo al llevarlos a cabo, como en la alimentación y otros en salud; tuve ese pequeño y grande a la vez destello de comprensión del alcance de esta frase a mi entender.

En un principio recordé la primera sensación percibida (impresión) al leerlo y fue una mezcla entre zanganería, consuelo y fatal lejanía.  Luego accionando en diversas intenciones diarias fui comprendiendo que de nada pasaba a algo y que el instante de Consciencia al responsabilizar cada acción cumplida era parte de un todo que a su vez se estaba construyendo.  Que no había tal lejanía si la concentración o el enfoque estaba en disfrutar el camino ahora, que eso era lo importante y no la meta final... pues logros son posibles si vemos lo simple y pequeño primero que es parte alcanzada en responsabilidad sobre el manejo de la propia energía e incluso son acciones que abarcan mas de lo que apreciamos a simple vista, semillas que darán frutos si se quiere.  Que esos instantes de reconocimiento no desde el ego que seguro quiere dar maestrías rápidamente, es mas que todo un pequeño y grande a la vez aporte hacia energías que confluyen entre sí dando forma a la octava rápida del día que es nutrida por esos octanajes impulsores de ser un poco menos inconsciente en el recorrido, juntando certeza, voluntad, acción, coherencia, CEHP.  Ese nada en verdad siento que es posible convertirlo en algo superior al tomar decisiones en pequeñas pero vitales aspectos para el bienestar energético, en principio pequeñas, quizás acorde a nuestro estado que va dejando atrás lo tóxico y dañino que sabemos influye en nuestras energías del día a día.

Y así la atención ahora se enfoca por señales en el camino, temas recordados recientemente como los 7 hombres y los TFL y sus respectivas cerraduras que en instantes tenemos el poder de atender en consciencia, emociones y aspectos que quizás van y vienen pues como lo veo es un proceso que va transformando en instantes continuos hasta lograr estabilidad en el manejo y atención consciente sin dudas del alma que entorpecen el avance, pero que en lo particular  reconozco que el mal trato que nos damos a nosotros mismos cuando no es posible alcanzar aún algún punto emprendido es un latigazo que no sirve para nada a menos que el ego requiera protagonismo entre idas y vueltas en la historia sin fin.  Así que he comprendido en esta frase del principio junto a los octanajes que giran en cada rueda de los TFL y el superar los hombres 123 que es cuestión de necesidad prioritaria mas allá de intereses particulares, sabiendo a dónde vamos, consciente de que la responsabilidad y esfuerzo de instantes es el valor cercano que nos recuerda que la intención y propósito inicial es proporcional a la esfera de Consciencia.  

Aunque no nos vean accionar en la parte interna de la Cinta, esa semilla sembrada en la oscuridad, sin bombos ni platillos es poder interactuar en la parte externa con las implicaciones puestas en práctica haciendo de la información conocimiento, limpiando y ordenando el mental... compartidas los sábados en Encuentros y Aulas DDLA y siempre que sea posible en Certezas que abrirán mas puertas dispuestas hacia y por el prójimo en el tiempo del no tiempo.